EXPEDICIÓN DEL 2009: Bautizos en la "Cumbre" del Ritacuba Blanco en el 2009

Gonzalo y Camelia no se esperaban que en la cumbre de ellos, a más de 5.000 m.s.n.m. en el Ritacuba Blanco, Andrea Molina oficiaría la ceremonia del Bautizo de la Cumbre, para que ellos siguieran coronando cumbres en Sur América y en el resto del mundo. A continuación se presentan dos videos de esta ceremonia.






El primero de varios videos de la "cumbre" del Ritacuba

Este es el primer video grabado a más de 5.000 m.s.n.m. Los fabricantes de la videocámara dicen que esta no se puede usar a más de 3.000 metros por ser de disco duro. Valió la pena arriesgar el valor de un equipo ante la majestuosidad del glaciar más grande de Colombia.

Video: Asier, Gonzalo, Camelia y Andrea encordados sobre el glaciar.

Cumbre en el Ritacuba Blanco, S N El Cocuy Colombia

Cuando faltaban pocos metros de desnivel para alcanzar la cumbre, después de una hora caminando por el glaciar, encordados, caminando con crampones, con las polainas puestas para que el calor del tobillo no derritiera la nieve y de esa manera evitar la humedad en los pies, Gonzalo se imaginó que estaba caminando por la Luna y por la impresión de ese glaciar inmenso se sintió cansado. Entonces pidió a Andrea y Asier que fijaran ese lugar, como su propia cumbre. En ese momento celebraron !!!!cumbre!!!, presentaron a la Virgen del Carmen y celebraron la ceremonia del bautizo de la cumbre oficiado por Andrea Molina.



Foto: Asier, Camelia y Gonzalo encordados, iniciando la subida del glaciar del Ritacuba Blanco. Foto tomada por Andrea Molina. Al frente, la cumbre del Ritacuba Negro.





Foto: Asier y Camelia atacando la cumbre del Ritacuba Blanco. Al fondo Miguel, quien sube casi todos los días.








Foto: Camelia (63) felicitando a Gonzalo (65) por la proeza.






Foto: Listos para descender.





Foto: Andrea en el centro, grabando videos para recordar.

Foto: Gonzalo y Camelia en su propia cumbre (unos metros de desnivel antes de la verdadera), celebrando con la Virgen del Carmen, la misma que los acompañó al Pico Bolívar (Venezuela).


Otras aventuras: Reseña de Panorama (Maracaibo)

ABUELOS coronaron el pico Bolívar
Tomado del diario Panorama del 23 de diciembre de 2007
Texto: Annel Mejías (Periodista del diario Panorama, radicada en en Mérida)




A las 2:30 pm del 15 de diciembre llegaron al busto de Simón Bolívar. Ascendieron desde los 4.600 m.s.n.m, en la Laguna de Timoncito, hacia los 4.980 de la cumbre más alta del país. Los acompañaron sus yernos y un amigo.

Con la garganta llena de emoción, nerviosos y agotados, los esposos Godoy Jiménez rompieron el silencio del Pico Bolívar a las 2:30 de la tarde al gritar a todo pulmón: “¡¡Cuumbreee!!” el pasado sábado 15 de diciembre.

Estaban allí, junto al busto de Simón Bolívar, sentados a 4.980 metros sobre el nivel del mar (m.s.n.m), sostenidos por una laja de piedra gris, dándole la espalda a un precipicio.

Pocos minutos fueron suficientes para decir lo que deseaban. “¡Jesús, te amo, te necesito!”, dijo emocionada Camelia Jiménez de Godoy, de 62 años, mientras su esposo Gonzalo Godoy, de 64 años, izó la imagen de la Virgen del Carmen entre la neblina y recitó un Ave María para honrar a la Madre de Dios.

Aníbal Rodríguez, su yerno, y Franklin López, amigo, los acompañaron en esta aventura.



Experiencia

“Uno se queda sin respiración al ver la grandeza del Creador, todo es tan perfecto, hace la invitación para que uno se pregunte de dónde soy y quién soy”, reflexiona Camelia ya tranquila, en la casa de su hija en Mérida.

A pesar de estar en verano, les nevó dos veces “y cayó granizo también. La montaña se comportó como en invierno”, relata Gonzalo, quien hoy llegaba a Maracaibo, su hogar desde hace 40 años desde que se casó con Camelia.

“Somos tocuyanos, pero maracuchos de corazón. Siempre que participamos en un evento deportivo representamos al Zulia. Nuestras dos hijas nacieron en Maracaibo y hemos practicado velerismo desde 1977 en el Lago”, dice Gonzalo.

Frotándose los dedos, Camelia cuenta que las manos aún no le han despertado bien, “imagínate cómo era el frío allá. Fue bueno, pero duro”, explica para describir cómo es estar en medio del choque de vientos que suben del cañón del Chama, desde Mérida, y de los Llanos de Barinas.

La iniciativa

Hace un año Gonzalo le propuso a Camelia subir el pico Bolívar. “Lo vi un poco lejano, pero acepté. Cualesquiera de los dos invita para las aventuras”, expone ella, quien practica con su esposo excursiones en Gran Sabana y marcha olímpica.

Entre ocho y diez kilómetros diarios caminaban en la Vereda del Lago para prepararse físicamente para el nuevo reto.

El año pasado subieron dos veces hacia la Laguna Coromoto, en Mérida. Luego intentaron conquistar Pan de Azúcar, en el páramo La Culata, y “fue frustrado, me dio mal de páramo”, confiesa Camelia. “Después del Bolívar, ya eso me parece sencillo”.

Darwin López, Joel Jiménez y Joel Sánchez formaron el equipo de guías, “los dorados ángeles de la guarda”, los llaman ellos.

Los expertos les sugirieron que, por su edad, no hicieran el recorrido completo desde la Mucuy hacia la Coromoto y luego a la cumbre, sino que fueran desde el Espejo hacia el Bolívar, donde necesitarían mucha energía.

El jueves 13 de diciembre ascendieron por teleférico hasta la estación La Aguada para aclimatarse y caminaron hacia la posada de Pedro Peña, nieto de Domingo Peña, el primer nevadero en llegar al pico Bolívar.

Allí se quedaron esa noche. Al día siguiente tomaron el teleférico hasta el Espejo, a 4.765 m.s.n.m, donde iniciaron la caminata el sábado a las 7:30 am.

Gonzalo y Camelia bajaron por los riscos de La Cloaca para llegar a la explanada de la Laguna de Timoncito, donde armaron su campamento a 4.600 m.s.n.m.

“Subimos por la Ruta Weiss, la más sencillita, entre comillas”, recuerda Camelia, quien junto a su compañero, yernos y amigos arribaron a un sitio llamado la Roca Táchira, luego se desviaron hacia La Ventana y allí, sobre una cornisa, coronaron. Ellos le dieron la espalda al llano de hielo de la ruta norte, se desviaron hacia el glaciar principal del Pico y entraron por el sur para subir a la cumbre.

“Nuestros ángeles nunca habían guiado a parejas de nuestra edad. Dicen que es la primera vez que sube un matrimonio venezolano mayor de 60 años”, explica Camelia, quien es abuela de cuatro hermosos nietos.

La bajada

Una vez atrapados entre la montaña y la nieve, sólo se escuchaba el sonido del silencio. “El camino no se ve, es como la canción: caminante no hay camino, se hace camino al andar”, describe Camelia.

Al regresar, un percance ocurrió. Justamente bajando una cornisa en rapel, una corriente de aire la movió para hacer un péndulo.

En vez de soportarse con el pie, se lesionó su rodilla derecha y en el rebote se golpeó la cadera izquierda. “Cuando miré para abajo y vi unos 12 metros de cuerda, me puse torpe”, dice entre bromas Camelia, recordando ese doloroso instante que le hizo comprender la importancia del compañerismo en este deporte.

Después, cayó de lado por una rampa nevada en forma de escalera, soltándose de los guías que la cargaban.

En los diez minutos que duró acostada sobre la nieve, esperando que la rescataran, camelia sintió lo agradable que es vivir en paz cada día.

“Siempre he querido dar lo mejor de mí: ser la mejor madre, la mejor esposa, vecina. Allí estaba tan tranquila y confiada que no lloré ni sentí miedo, porque no debía ningún ‘te amo’ a nadie”, dice conmovida.

El guía Darwin se lo había asegurado: “Señora Camelia, no se preocupe, así como le prometí la cumbre, le prometo el regreso”, le dijo.

Y así, en chuco, en silla de mano, en rapel y colgada, las 7:30 pm llegó a la ciudad de Mérida, con ganas de seguir escalando junto a su esposo otras montañas de Latinoamérica.

Montañismo: ¿ Locura o pasión y respeto por las montañas?

¿De dónde nace la pasión por el montañismo, si dormir en carpas es incómodo, frío y húmedo?. Un hotel 5 estrellas en cualquier capital del mundo ofrece más confort. Una Piña Colada, servida alrededor de una piscina produce placer por unos momentos, pero esto no se puede comparar con lo que se siente cuando se camina, por ejemplo, desde la Laguna Grande de Los Verdes hasta el Paso del Cardenillo: es una mezcla de sentimientos, uno de ellos es, el producido por el esfuerzo físico, caminando con un ritmo fuerte de respiración cuidando de no caer en el ejercicio anaeróbico, para poder soportar 6 o más horas de caminata. Por otra parte uno se siente tan pequeño ante la grandeza de la montaña, que la considera sagrada y lo conduce a meditar a medida que camina. Esa meditación lo llena de fe, silencio y ganas de confesarle a la montaña la admiración por ella, luego vienen las ganas de llorar, y finalmente, el llanto callado (esta es la mayor meditación que se puede lograr). Cuando se llega a la cima o campamento, viene el premio por el esfuerzo y la preparación de muchos años para lograr ese collado, cima o ese paso montañoso. Los recuerdos de esos sentimientos mezclados son los que perduran y nos preparan para regresar de nuevo a la montaña.
Foto: Asier Bilbao (guía y amigo) y Gonzalo en una subida que invita a la meditación



Foto: Montañista en otro esfuerzo



Después de los 60´s: Aumentar las medidas de seguridad

Para el próximo viaje a la Sierra Nevada El Cocuy, se llevarán un par de teléfonos celulares GSM para comprar dos Tarjetas Sim de Comcel, que tienen señal en las cumbres y varios lugares de la Sierra. Guardarán los números telefónicos en la memoria del teléfono, de personas e instituciones claves en una eventual emergencia: Sr. Hernando (Cabañas Kanwara), Marlene (Cabañas Guaicany), Arrieros, Grupos de rescate (El Cocuy y Guican) e Instituto de Parques Naturales en Güican y El Cocuy. Contrataran a los mismos guías experimentados (Asier Bilbao y Andrea Molina), de manera que las travesías y ascensos se conviertan sólo en placer y esfuerzo físico.
La navegación a vela (mas de 30 años de experiencia) y el buceo (lo aprendió Gonzalo desde el año 1963) les han enseñado, que la preparación y la seguridad son las cosas mas importantes. En el mar, cuando se siente que puede venir una tormenta, se deben tomar rizos a la vela o arriarlas por completo mucho antes de que aparezca la tormenta. En la noche se deben colocar líneas de seguridad de proa a popa para desplazarse unido a ellas, por medio de un arnés, en caso de necesidad de hacer una maniobra en cubierta. En el Caso de las cumbres, Asier y Andrea llevaron piolets, crampones, arneses, cuerdas para caminar encordados, estacas para el glaciar, lentes protectores de UV A y B entre otros equipos.





Foto: Med. Vet. Andrea Molina, Guía de Montaña, Experta en Sishapagma (Nepal) y casi todos los picos Andinos, parece que esta diciendo delante del ritacuba Negro, "yo te protejo".


Foto: Perdón, Asier y yo te protejemos





Foto: Camelia bajando del Nevado Pan de Azucar, encordada con Asier Bilbao, por la dificultad de bajar por las piedras. Nótese la estaca y la cuerda de seguridad que lleva Asier.



Foto: Gilberto, arriero cargando las tulas para llevarlas a la Laguna de la Plaza. Con llamarlo por telefono se presenta en cualquier lugar de la Sierra. Enseñó a Camelia como cabalgar.


Mensajero Satelital SPOT

Gonzalo es un entusiasta de la tecnología, llevaba en su morral un GPS, un medidor de oxigeno en la sangre (pulse oximeter), panel solar plegable para cargar baterías y un purificador de agua Katadyn. Pero cuando visitaron la tienda Tatoo en el CC Andino, vieron el SPOT, primer mensajero satelital del mundo con cobertura mundial. Lo compraron y lo activaron para que enviara señales a los correos de las hijas (María Camelia y María Belén) y a los yernos Aníbal Rodríguez y Daniel Paolino. El SPOT envía señales de OK (estamos bien) con la ubicación cada vez que se pulse el botón "OK". También envía señales del progreso del trekking cada 10 minutos cuando se acciona la modalidad de seguimiento, de manera que la familia los puede monitorear en tiempo real. Los mensajes van con un link a Google Maps con las coordenadas GPS del momento de enviar, para verlos en Google Maps o Google Earth. Al regreso las hijas le agradecieron la compra del “aparatico”.



Foto: El aparatico.



Gráfico: Imagen satelital de la Sierra Nevada el Cocuy. Los puntos rojos son las señales enviadas por el mensajero SPOT al grupo familiar. Al norte: seguimiento desde la Parada de romero hasta la Laguna Grande de Los Verdes. Luego desde la Cabaña Kanwara hasta cerca de la cumbre del Ritacuba y al Sur, la travesía hasta la Laguna de la Plaza. s decir... vieron todos los movimientos de Asier, Andrea, Gonzalo y Camelia.


Boquerones o pasos de montaña: Nos recuerda el Paso de los Andes

Cuando se atraviesan los pasos montañosos o boquerones como Cusirí, Patio de Bolos o Cardenillo, pequeñas aberturas en las cimas de las montañas que permiten el paso de un lugar a otro, nos llega el recuerdo del Ejercito Libertador, cruzando el paso del Los Andes, sin la tecnología que usamos actualmente, y sentimos mas respeto por lo que hicieron:

El Paso de Los Andes fue una campaña militar en la que Simón Bolívar dirigió sus tropas a través de los Andes colombianos para liberar a la Nueva Granada del dominio español durante las guerras de independencia de la América Hispana.

Es considerada una de sus acciones militares más destacadas y toda una hazaña para los medios técnicos de la época.

El 27 de mayo de 1819 inicia El Libertador, desde Mantecal, la marcha para liberar Nueva Granada. Esta campaña, que impuso el famoso paso de los Andes, duró setenta y cinco días. La culminación de esta hazaña fue la batalla de Boyacá que dio la libertad a la Nueva Granada.

En sorprendente y osado movimiento estratégico, el ejército patriota, disciplinado por oficiales extranjeros: ingleses, irlandeses, franceses y de otras nacionalidades europeas y reforzado con numerosos reclutas, cruzó los Andes e inicio la campaña de Nueva Granada.

La infantería partió el 27 de mayo de 1819 de Mantecal hacia los Andes. A costa de increíbles sacrificios y esfuerzos, atravesó el páramo de Pisba, donde muchos soldados murieron de frío, sostuvo con éxito los combates de Gámeza y Pantano de Vargas y, el 7 de agosto dio la batalla definitiva de Boyacá, donde cayeron prisioneros el jefe y más de 1.500 soldados realistas. Ante el avance patriota, el Virrey Juan Sámano abandonó Bogotá, que fue ocupada por Bolívar.

Francisco de Paula Santander fue designado vicepresidente de Nueva Granada y El Libertador volvió a Venezuela al siguiente mes.

El General neogranadino Francisco de Paula Santander iba a la vanguardia. El conocía bien el terreno que pisaba y era un hábil e inteligente militar. Tenía él para esta fecha 28 años. La marcha era dura, forzada, porque tenían que cruzar muchísimos ríos crecidos. Cuando llegaron a Pore, en menos de un mes habían recorrido 600 kilómetros.

Pero lo más duro estaba por delante. Para no tropezar con las fuerzas realistas y caerles de sorpresa, atravesaron con todo el ejército el páramo de Pisba, rodeado de barrancos y peñascos, por senderos que apenas si hacen posible la marcha y además con un frío aterrador y la molestia constante de la lluvia y el granizo. Aquello era casi superior a las fuerzas de los soldados.

Tal fue la marcha, que la caballería llegó sin caballos, sin armas y sin nada que les molestase, porque ya era bastante poder con el propio cuerpo.
Con todo, el general Barreiro les hizo frente en Gámeza y lo batieron por completo. Y días más tarde obtuvieron una ejemplar victoria en Pantano de Vargas. A marchas forzadas llegaron a Tunja y dos días después, el 7 de agosto libraron la famosa Batalla de Boyacá, en que el ejército español quedó rendido ante la osadía y el propio General Barreiro fue hecho prisionero. El Virrey Sámano, que estaba en Bogotá, abandona la capital y el ejército libertador la tomó el día 10.

Foto: Paso de Cusirí entre Laguna de la Plaza y Laguna Pintada

Foto: Paso Bella Vista entre la Laguna de La Plaza y Laguna Grande de La Sierra


Cumpleaños de Camelia (63)

Camelia pensaba que este año no iría a celebrar su cumpleaños, pero después del almuerzo en las Cabañas Guaicany, Asier se levantó de la mesa para traer una torta con 6 velas. Hubo mucha emoción y se cantó el cumpleaños feliz. Luego supimos que Maria Camelia (segunda hija) le escribió a Asier para que no dejara de celebrarlo. Andrea compró la torta en Bogota y la llevó a su lado durante todo el viaje.

Programa de la expedición a la Sierra Nevada El Cocuy, Colombia

Después de coronar el Pico Bolívar en Venezuela (4.980 m.s.n.m.) el 15 de diciembre de 2.007, Gonzalo Godoy (65) y Camelia de Godoy (63) se animaron a continuar como abuelos montañistas. Contrataron los mejores guías en http://www.colombiaandina.com/ para hacer la travesía de la Sierra Nevada El Cocuy, Boyacá, Colombia, en enero-febrero de 2009, con ascenciones a los nevados Ritacuba Blanco (5.330 m.s.n.m.) y Pan de Azucar (5.120 m.s.n.m.).

El programa original contemplaba hacer la travesía por el lado oriental de la Sierra Nevada, pero los guías en acuerdo con Gonzalo y Camelia modificaron el itinerario para evitar algunos pasos montañosos, fuertes para mayores de 60 años (Collado Balcones, 4.600m, Paso del Castillo 4.560m y Collado de La Sierra, 4.650m) y quedarse solo con los pasos Cusirí, Patio de Bolos y Cardenillo además de las cumbres del Ritacuba y Pan de Azúcar. Así se cumplió el programa modificado:

22 de enero: Maracaibo (al nivel del mar) – Bogotá (2.640 m.s.n.m.) por Aires.

23 a domingo 25 de enero: Bogotá, aclimatación y preparación.

26 de enero-Día 1: Bogotá - El Cocuy (2.650m) - Cabañas Guaicany (3.980m). Transporte en Van; 8h - Transporte en Campero (4x4); 1h. Alojamiento y cena en las cabañas.

27 de enero-Día 2: Cabañas Guaicany. Paseo suave de aclimatación por los alrededores. Cumpleaños Camelia (63). Excelentes vistas de todos los nevados de la vertiente oeste de la SN de El Cocuy. Alojamiento y comidas en las cabañas.

28 de enero-Día 3: Inicio del trekking, Cabañas Guaicany - Campamento Aguabendita (4.300m). Caminata: 4h. Apoyo de Caballos para transportar equipos.

29 de enero-Día 4: Intento de cumbre en el Nevado PAN DE AZUCAR (5.215m). Caminata 12h. Salida y regreso al campamento.

30 de enero-Día 5: Día de descanso en el campamento.

31 de enero-Día 6: Campamento Aguabendita - Laguna de La Plaza (4.300m), pasando por los pasos Cusirí (4.410m) y Patio de Bolos (4.350m). Caminata 6h. Apoyo de caballos para transportar equipos. Campamento en la Laguna de La Plaza.

1° de febrero-Día 7: Día en la Laguna de La Plaza (4.300m)

2 de febrero-Día 8: Laguna de La Plaza – Cabañas Guaicany (3.980m) caminando. Luego en campero (automóvil rustico) Hasta las Cabañas Kanwara (4.000m).

3 de febrero-Día 9: Todo el día en las Cabañas Kanwara. Camas, comidas y duchas agua caliente en las Cabañas Kanwara.

4 de febrero-Día 10: Intento de Ascenso al Nevado Ritacuba Blanco (5.330m). A pocos metros de la cumbre. Desnivel 1.330m

5 de febrero-Día 11: Cabañas de Kanwara (4.000m), descanso

6 de febrero-Día 12: Kanwara - Laguna Grande de Los Verdes al norte de la Sierra (4.100m).

7 de febrero-Día 13: Laguna de Los Verdes – Parada de Romero pasando por el Paso de Cardenillo (4.400m).

8 de febrero-Día 14: Kanwara- población de Güicán

9 de febrero-Día 15: Regreso a Bogota

11 de febrero: Regreso a Maracaibo (al nivel del mar) por “Aires”